La felicidad viene en muchas formas. Para ti, puede ser el sonido de la risa de un niño. Para otros, viene como el aire salado y ventoso de la playa o una casa limpia y todas las facturas pagadas.
Cualquiera que sea tu 'pedazo' de felicidad, necesita encontrar su camino en tu vida diaria. Los momentos simples de 'ah' son un botón de actualización automática. Ahora la tarea es, ¿cómo puedes hacer que sucedan todos los días?
Te planteo una pregunta: ¿Cuál es la prioridad en tu vida en este momento? ¿Es acaso el hacer una diferencia en el mundo, encontrar tu verdadero amor, ganar paz en el trabajo, perder cinco libras? O tal vez al ver el estado general del mundo, tratar de mantener la calma en medio de tantas cosas que suceden.
Estás atravesando por la avalancha emocional de cuidar a un ser querido mientras tratas de pasar los días evitando situaciones estresantes o negativas. Lo sientes venir: la ola de angustia, la tensión, la lucha en tu sueño, el chasquido sin razón.
Conozco esos días muy bien. Y también sé que es necesario encontrar formas de parar; ya sea por una hora, una tarde o un día entero, es esencial desconectarse con un tiempo de inactividad importante.
Incluso años después de brindar cuidados, he seguido cultivando la práctica del autocuidado. El fin de semana pasado mi computadora permaneció apagada, mi teléfono estaba encendido solo para llamadas o mensajes de texto y encendí el televisor para ver dos películas. Escuché música, salí a caminar y entretejí un pasatiempo divertido que no había hecho en años: armar un rompecabezas. (Ok, comencé a armar un rompecabezas. Son 1,000 piezas, por lo que será un proceso).
Mientras me sentaba inmersa en la clasificación y empalme, cantando junto con la música country (chica sureña aquí), me encontré en tal paz. Fue una forma maravillosa pero simple de tejer en la atención plena pacífica, y los efectos secundarios aún perduran.
Algo tan simple como un rompecabezas puede cambiar tu perspectiva. No lavará los platos por ti ni resolverá los problemas del mundo, pero seguramente puede detener la mente acelerada y añadir un poco de equilibrio a tu vida.
Y recuerda siempre… R-E-S-P-I-R-A
Abrazos, Cyndi Mariner
Breathing Spaces
