top of page

Eventos que cambian la vida



Mientras escribo hoy, me estoy preparando para ir al funeral de la mamá de un ser querido. Nunca había pasado por esto antes, y el proceso es doloroso de ver. Tengo amigos con sus madres cerca del final de la vida o con una enfermedad que les impide recuperarse. Otros están abrumados con el papeleo del patrimonio de sus seres queridos mientras luchan contra las lágrimas. Ninguno de estos son pasajes simples, y tantos recuerdos me han tocado a través de estas experiencias.


Las decisiones que tomamos durante nuestros días de cuidado y después son esenciales para hacer las paces. Hacerlos a menudo puede ser casi paralizante. Decisiones de atención médica, atención domiciliaria versus centros de atención, ¿qué pasa si finalmente son las equivocadas?


Nunca olvidaré los días posteriores a la muerte de mi mamá. El día que tuve que recoger yo sola sus cenizas. Estaba en un estado mental surrealista cuando coloqué su caja en el asiento del pasajero a mi lado, colocando el cinturón de seguridad alrededor de ella. "Ma, necesito llevarte a casa a salvo". El estado de shock, los recuerdos que me inundaron mientras miraba su caja envuelta en terciopelo, era un sentimiento que no puedo expresar con palabras. Estaba tan aturdida (aunque sabía que su muerte era inminente) que los días pasaban como minutos.


Recuerdo revisar su armario y tomar cosas para donar el día después de su muerte. ¿Duro? No. Revisar su ropa sería una de las cosas más desafiantes que tendría que hacer, así que actué en consecuencia mientras todavía estaba completamente borroso. Parecía aliviar un poco el dolor. Organizar una venta de bienes fue una locura, pero era importante para mí ocuparme de las pertenencias de mis padres con cuidado como lo habían hecho durante tantos años antes.


La vida es una aventura interesante; no venía con un manual de instrucciones para las emociones. Te encuentras en medio del dolor antes de comenzar a buscar ayuda, e incluso si te hubieran "informado" sobre cómo sería, posiblemente no puedas saberlo hasta que estés allí.


Dondequiera que estés en tu viaje de cuidado, deténte y permite que los momentos simples se conviertan en los grandes momentos de tu vida. Sé amable, gentil y paciente contigo mismo, y recuerda respirar y buscar ayuda cuando sea necesario.


En paz,

Cyndi Mariner

Breathing Spaces

15 visualizaciones0 comentarios
bottom of page